Sobre las asambleas de barrios
Esto es una pequeña reflexión a título personal de algunas ideas que a lo largo de esta semana se me han ido ocurriendo y que me gustaría compartir.
Para mí, lo más importante de todo lo que ha ocurrido durante esta semana en la Plaza del 15M, no tiene que ver con el número de gente que se ha acercado, ni con el resultado de las elecciones, ni con la imagen que se ha dado hacia fuera por la tele o los medios, sino la demostración a todxs los que hemos participado de lo que somos capaces de hacer por nosotrxs mismxs. La capacidad de autoorganizarnos y ver que hemos sido capaces de gestionar un espacio público para que no nos faltase nada (alimentos, materiales, gabinete jurídico, sanitario comisiones de información, creatividad, de acción etc..) y sobretodo de la capacidad de hacer política de verdad (no partidismo) con mayor o menor éxito, debido a las limitaciones que teníamos (exceso de gente, falta de experiencia de muchas personas en procesos asambleario o de lucha etc..).
Nos hemos demostrado a nosotrxs mismxs que podemos autogobernarnos, que podemos crear una organización e ir cambiándola en función de nuestras necesidades (delegados revocables y rotativos, autocrítica etc..)
Otro aspecto que veo que ha sido un éxito (dado los tiempos que corren) es conseguir estar tanto tiempo en un espacio al aire libre sin convertirlo en un botellón lo que hecho que haya sido un espacio de trabajo y reflexion y no una fiesta, como les hubiera gustado a lxs politicxs para poder “rajar” de nosotrxs a la par que hubiera mermado nuestra capacidad de curro.
Por suerte o por desgracia la experiencia de la plaza en algun momento se disolverá ya que es muy complicado seguir a ese ritmo mucho más tiempo, aparte de que una vez pasadas las elecciones, ya no somos un pastelito para los patéticos partidos minoritarios en busca de algún voto “indignado”, ni para los mayoritarios que intentaban usarnos, unos, para desacreditar a otros y otros, para dárselas de enrollaos al “respetar” y no desalojar una protesta en plena campaña electoral. Pero ahora el circo ha acabado, y como cabía esperar todo sigue igual, en estos momentos deben estar repartiéndose el pastel una vez más y haciendo una porra sobre cuánto tiempo duraremos aquí antes de que nos echen a patadas, porque si esto durase, entonces sí que empezaríamos a ser molestos…
Para que toda esta experiencia que se ha vivido en la plaza no se evapore se decidió bajar esto a los barrios y seguir trabajando de la misma manera y seguir coordinados para poder apoyarnos Desde mi modesta opinión ahora toca lo difícil y lo importante…ahora no se trata como por ahí se ha oído de “captar” a la gente que no ha estado en la plaza, pero si de crear un espacio abierto en cada barrio de debate y de convivencia horizontal. No nos hará falta captar a nadie porque si lo hacemos bien…la gente que le interese se acercará a ver qué está pasando y pasará a formar parte de esto.
De la misma forma no podemos pensar que esto que se ha creado es algo nuevo y revolucionario puesto que mucha gente lleva años trabajando de esta manera, con más o menos éxito en cada barrio, colectivos, asociaciones de vecinos, centros sociales etc… No les vamos a iluminar pero de cierta manera si les animará que haya más gente funcionando así y tan cerca, pues habrá muchos puntos en común en los que podamos colaborar y trabajar juntxs..
Creo que nuestro proyecto en los barrios tiene que pasar primeramente por la convivencia y la formación.
A lo mejor estaría bien para empezar y aprovechando el buen tiempo, el tomar la calle para encontrarnos, no quiero que nos relacionemos en un bar con la música alta, una cerveza entre medias y dinero en el bolsillo (porque no tengo, entre otras cosas) prefiero hablar en una plaza con comida de mi huerto para compartir y hablar alto porque seamos muchos, y no porque no nos oigamos con la música.
Otra cosa necesaria es la formación, cada uno tiene sus experiencias y recorridos políticos o no, de una u otra corriente y eso a veces nos limita para no hablar o para hacerlo demasiado, para ir por un camino o por otro, por eso estas asambleas deben ser autónomas, de individuos libres y sin representación de ningún partido o sindicato etc., y sobre todo de respeto, para debatir y discutir pero para entendernos y avanzar.
Espero que esta asamblea también sea un espacio de formación y debate, hay miles de temas que nos atañen, o que nos interesa tratar, pues para que las cosas cambien no basta solo con acampar y pedir que nos resuelvan la papeleta, es necesario saber cómo funciona el sistema, qué otras opciones hay, como hemos llegado a la situación actual, qué podemos hacer, así como temas concretos y específicos como capitalismo, genero, ecología, tecnología, educación, historia, autogestión y un sinfín más de temas que se nos ocurran. En esta acampada la gente hemos hablado, Por primera vez hemos construido nuestras ideas y opiniones, y con ello nuestra realidad, no nos lo ha contado e impuesto la tele ni el periódico, hemos oído opiniones que nos gustaban y otras que no, y hemos tenido la oportunidad de apoyarlas o rebatirlas, recuperar estos espacios de hablar y discutir es fundamental para formarnos porque una sociedad formada no se deja manipular.
Seria genial que esta asamblea se convierta, sin necesidad de acampar, en un espacio de autosuficiencia, todxs tenemos cosas que sabemos hacer, o cosas que tenemos y podemos intercambiar y tareas en las que ayudar, o la necesidad de que nos ayuden, igual que se ha hecho en la plaza del 15m durante esta semana. Eso se llama autogestión, y si somos capaces de autogestionarnos, no necesitamos al poder ni a sus gestores (políticos y empresas), y eso es el verdadero cambio desde la base, eso es la democracia directa, por eso me gustaría proponer un banco de tiempo, comunidad de trueque o como queráis llamarlo donde nos podamos relacionar y ayudar sin dinero de por medio y con la intención de crecer de forma colectiva y solidaria.
Nosé…mientras escribo esto, pienso que lo que me gustaría es hacer una acampada de nuestras vidas diarias, trasladar la autoorganización a nuestras vidas, aquí y ahora, en nuestro barrio. No volver a ser otra vez ciudadanos aislados sino retomar el papel de personas libres, vivas y solidarias que se relacionan entre ellas y crean su entorno en función de sus intereses y necesidades…y lo vuelvo a repetir, para eso, no necesitamos políticos ni nadie por encima de nosotrxs, necesitamos solamente la convicción de queremos y somos capaces de ser los protagonistas de nuestras vidas.
Sobre les assemblees de barri
Açò és una xicoteta reflexió a títol personal d’algunes idees que al llarg d’aquesta setmana se m’han anant ocorrent i que m’agradaria compartir.
Per a mi, el més important de tot el que ha passat durant esta setmana a la Plaça 15M no té res a veure amb el nombre de gent que s’hi ha arrimat, ni amb el resultat de les eleccions, ni amb la imatge que s’ha donat cap a fora per la tele o els Media, sinó la demostració a tots els qui hem participat del que som capaços de fer per nosaltres mateix. La capacitat d’autoorganitzar-nos i veure que hem estat capaços de gestionar un espao públic perquè no ens faltara res (aliments, materials, gabinet jurídic, sanitari, comissions d’informació, creativitat, acció, etc.), i sobretot de la capacitat de fer política de veritat (no partidisme) amb major o menor èxit, degut a les limitacions que teníem (excés de gent, falta d’experiència de moltes persones en processos assemblearis o de lluita, etc.).
Ens hem demostrat a nosaltres mateix que podem autogovernar-nos, que podem crear una organització i anar canviant-la en funció de les nostres necessitats (delegats revocables i rotatius, autocrítica, etc.)
Un altre aspecte que veug que ha estat un èxit (donats els temps que corren) és aconseguir estar tant de temps en un espai a l’aire lliure sense convertir-lo en un “botellón”, la qual cosa fa que haja estat un espai de treball i reflexió, i no una festa, com els haguera agradat als polítics per poder “trallar” contra nosaltres.
Per sort o per desgràcia, l’experiència de la plaça en algun moment es dissoldrà, ja que és molt complicat seguir a eixe ritme molt més temps, a part que, un cop passades les eleccions, ja no som un pastisset per als partits minoritaris a la recerca d’algun vot “indignat”, ni per als majoritaris que intentaven usar-nos, uns per desacreditar els altres, i els altres per donar-se-les de ser “del rotllo” al respectar i no desallotjar una protesta en plena campanya electoral. Però ara el circ ha acabat, i com era d’esperar, tot segueix igual. En aquests moments deuen estar repartint-se el pastís una vegada més i fent una “porra” respecte el temps que durarem ací abans que ens tiren a patades, perquè si açò durara, aleshores sí començaríem a ser molestos...
Perquè tota aquesta esperiència que s’ha viscut a la plaça no s’evapore, es va decidir baixar als barris i seguir treballant de la mateixa manera, seguir coordinant-nos per recolzar-nos.
Des de la meua modesta opinió ara toca el més difícil i el més important. Ara no es tracta, com diuen per ahí, de captar a la gent que no ha estat a la plaça 15M, sinó de crear un espai de debat obert en cada barri i de convivència horitzontal. No ens cal captar ningú perquè, si ho fem bé, la gent a qui li interesse s’aproparà a veure què està passant, i passarà a formar part d’açò.
De la mateixa forma, no podem pensar que açò que s’ha creat és una cosa nova i revolucionària, ja que molta gent porta anys treballant d’aquesta manera, amb més o menys èxit en cada barri. Col·lectius, associacions de veïns, centres socials, ...
No anem a il·luminar ningú, però en certa forma sí els animarà que hi haja més gent funcionant així i tan a prop, ja que hi haurà molts punts en comú en els quals podrem col·laborar i treballar junts.
Crec que el nostre projecte en els barris ha de passar primerament per la convivència i la formació. Potser estaria bé per començar, i aprofitant el bon temps, prendre el carrer per trobar-nos. No vull que ens relacionem a un bar amb la música alta, una cervesa i diners a la butxaca (perquè no en tinc, entre altres coses). Preferisc parlar en una plaça amb menjar del meu hort per compartir i parlar alt i fort perquè en som molts, no perquè no ens sentim a causa de la música.
Una altra cosa necessària és la formació. Cadascú té les seues experiències i recorreguts polítics o no, d’una o una altra corrent, i això de vegades ens limita per no parlar o per fer-ho massa, per anar per un camí o per un altre. Per això aquestes assemblees deuen ser autònomes, d’individus lliures i sense representació de cap partit, sindicat, etc. I sobretot de respecte per debatre i discutir, però per entendre’ns i avançar.
Espere que aquesta assemblea també siga un espai de formació i de debat. Hi ha milers de temes que ens corresponen, o que ens interessa tractar. Però perquè les coses canvien no és suficient només amb acampar i demanar que ens resolguen la papereta. És necessari saber com funciona el sistema, quines altres opcions hi ha, com hem arribat a la situació actual, què podem fer, així com temes concrets i específics com capitalisme, gènere, ecologia, tecnologia, educació, història, autogestió i un miler de temes que se’ns puguen ocórrer. En aquesta acampada la gent ha parlat, per primera vegada hem construït les nostres idees i opinions, i amb això, la nostra realitat. No ens ho han contat i imposat per la tele i els diaris. Hem sentit opinions que ens agradaven i altres que no, i hem tingut l’oportunitat de recolzar-les o rebatre-les. Recuperar aquests espais de parlar i discutir és fonamental per formar-nos, perquè una societat formada no es deixa manipular.
Seria genial que aquesta assemblea es convertira, sense necessitat d’acampar, en un espai d’autosuficiència. Tots tenim coses que sabem fer, o coses que tenim i podem intercanviar, i tasques en les quals ajudar, o la necessitat que ens ajuden, talment s’ha fet a la plaça 15M durant aquesta setmana. D’açò se’n diu autogestió, i si som capaços d’autogestionar-nos, no necessitem el poder ni els seus gestors (polítics i empreses), i això és el vertader canvi des de la base. Això és la democràcia directa. Per això m’agradaria proposar un banc de temps, comunitat de bescanvi o com es vulga anomenar, on ens podem relacionar i ajudar sense diners pel mig i amb la intenció de créixer de forma col·lectiva i solidària.
No sé... Mentre escric açò pense que el que m’agradaria és fer una acampada de la nostra vida diària, traslladar l’autoorganització a les nostres vides, ací i ara, al nostre barri. No cal tornar a ser novament ciutadans aïllats, sinó reprendre el paper de persones lliures, vives i solidàries que es relacionen entre elles i creen el seu entorn en funció dels seus interessos i necessitats. I, repetisc novament, per a axiò no necessitem polítics i ningú per damunt de nosaltres. Necessitem solament la convicció d’estimar-nos i ser capaços de protagonitzar les nostres vides.
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